Aplicado por primera vez a los poemas de Stéphane Mallarmé y Paul Verlaine en 1886, el término simbolista pronto se utilizó también para referirse a las artes plásticas en las que una representación realista del mundo natural daba lugar a imaginarias escenas de ensueño con un contenido psicológico, sexual y místico.
El simbolismo fue un amplio fenómeno internacional, pero especialmente presente en Francia, donde pintores como Gustave Moreau y Odilon Redon dieron la espalda al realismo, el naturalismo y el impresionismo para llenar sus lienzos con visiones esotéricas y, a menudo, eróti
Aplicado por primera vez a los poemas de Stéphane Mallarmé y Paul Verlaine en 1886, el término simbolista pronto se utilizó también para referirse a las artes plásticas en las que una representación realista del mundo natural daba lugar a imaginarias escenas de ensueño con un contenido psicológico, sexual y místico.
El simbolismo fue un amplio fenómeno internacional, pero especialmente presente en Francia, donde pintores como Gustave Moreau y Odilon Redon dieron la espalda al realismo, el naturalismo y el impresionismo para llenar sus lienzos con visiones esotéricas y, a menudo, eróti