Asturias alberga un sinfín de sorpresas capaces de seducir a todo tipo de viajeros. Oviedo es una ciudad rebosante de iglesias y palacios que atrae por su belleza y su animado ambiente, pero más allá de la capital, esperan también otras ciudades que no defraudarán al visitante, como la bulliciosa y sorprendente Gijón, o la industrial Avilés, con un casco medieval muy bien conservado. Y además de sus atractivos urbanos, Asturias ofrece también una plétora de tesoros naturales: un hermoso litoral salpicado por recoletas villas marineras, y numerosas y plácidas playas, un interior repleto de t
Asturias alberga un sinfín de sorpresas capaces de seducir a todo tipo de viajeros. Oviedo es una ciudad rebosante de iglesias y palacios que atrae por su belleza y su animado ambiente, pero más allá de la capital, esperan también otras ciudades que no defraudarán al visitante, como la bulliciosa y sorprendente Gijón, o la industrial Avilés, con un casco medieval muy bien conservado. Y además de sus atractivos urbanos, Asturias ofrece también una plétora de tesoros naturales: un hermoso litoral salpicado por recoletas villas marineras, y numerosas y plácidas playas, un interior repleto de t
