Con el formidable éxito de ventas de Entre limones —el divertidísimo relato autobiográfico de un joven inglés que, con tal de no vestir traje y acudir a una oficina, se gasta todos sus ahorros en la compra de un ruinoso cortijo en la Alpujarra granadina—
Con el formidable éxito de ventas de Entre limones —el divertidísimo relato autobiográfico de un joven inglés que, con tal de no vestir traje y acudir a una oficina, se gasta todos sus ahorros en la compra de un ruinoso cortijo en la Alpujarra granadina—